Las recomendaciones específicas dependen de la edad así como del
estado del niño. Los bebés de menos de un mes y con bajo peso al nacer
se les recomienda la aplicación intravenosa de vancomicina (15 mg por
kilogramo de peso corporal cada seis horas). Más la ceftazidima (50 a
100 mg por kilogramo de peso corporal cada 8 horas) debido al alto
riesgo de infección nosocomial con estafilococos o con bacilos
gramnegativos.
Tras el tratamiento, la paciente normaliza los niveles de proteínas,
nivel de glucosa y ácido láctico.
Comienza a comer con normalidad, desaparecen las dificultades
respiratorias y la rigidez en la nuca.
La paciente está en vigilancia y días después abandona el hospital.
Tras recibir el alta hospitalaria, un niño que ha padecido una meningitis
bacteriana puede reincorporarse a su vida habitual sin ninguna
medida especial.