La profilaxis para prevenir la meningitis es la vacuna. Algunas vacunas
existentes contra la meningitis en el mercado solo protegen un solo tipo
de bacteria determinada. Es por ello que cuando uno recibe una
vacuna contra la meningitis, sólo quedará inmune frente al tipo de
germen pero no frente al resto de las múltiples posibilidades. Es
decir, que aunque recibamos muchas vacunas contra la meningitis,
siempre es posible contraer meningitis por otros gérmenes o
causantes externos.